Al final aquel rayito de esperanza resultó ser demasiado débil. Mastropiero tenía cáncer y éste se había empezado a extender a otros órganos. No había nada que hacer, y mi gato querido no despertó de su operación.
Yo ya me lo olía. Ayer por la tarde le subí a su ventana favorita, a que mirara el paisaje y oteara a las palomas con ojos de cazador, y me ronroneó y se frotó contra mis piernas como hacía mucho tiempo que no hacía. Tuve la clara impresión de que se despedía de mí...
Gracias a todos por el apoyo.
Yo ya me lo olía. Ayer por la tarde le subí a su ventana favorita, a que mirara el paisaje y oteara a las palomas con ojos de cazador, y me ronroneó y se frotó contra mis piernas como hacía mucho tiempo que no hacía. Tuve la clara impresión de que se despedía de mí...
Gracias a todos por el apoyo.
Vaya, lo siento mucho. Quédate con los buenos momentos. Mucho ánimo.
ResponderEliminarLo siento mucho. Animo!
ResponderEliminarGracias a ti por dejarnos compartir este momento.Y sí,yo creo que Mastropiero se estaba despidiendo de ti:los animales son absolutamente increíbles.
ResponderEliminarSí que es curioso ese instinto animal cuando presienten que están en las últimas. Mi perro se dedicó a escaparse todos los días, algo que no había hecho nunca.
ResponderEliminarJoder, lo siento mucho. Se lo que es eso y es un mal trago. Besucos.
ResponderEliminarLo siento mucho.
ResponderEliminarKe palo, de verdad. A hacerse fuerte, ke es lo ke toca.
ResponderEliminarLo siento, chico.
ResponderEliminarUn abrazo.
ResponderEliminarBesitos
ResponderEliminarEntiendo bien lo que sientes.. te envío un abrazo enorme.. Mastropiero irá ya siempre contigo
ResponderEliminarPoco que añadir, que esas cosas hay que irlas curando poco a poco (la compañía de Woodehouse no es mala elección). Un abrazo.
ResponderEliminar:(
ResponderEliminarVaya. Sé lo que es eso, yo también pasé por ello.
Jo.
ResponderEliminarMuchísimos besos, cielo. Un abrazo.
JODER.
ResponderEliminarUn abrazote.