Para aquellos que no hacen puente, un poco de energía mañanera de la mano de la reina indiscutible del scat:
Recomendable para todos los públicos, incluso para aquellos desafortunados alérgicos al jazz, esta versión del estándar Stompin' at the Savoy es un irrefrenable torrente de alegría y ritmo; en esta grabación Ella Fitzgerald se encuentra en la cima de sus facultades y sus acompañantes, con el piano de Oscar Peterson a la cabeza, no se quedan a la zaga. Escuchar el disco al que pertenece siempre me pone de buen humor; espero transmitir un poco de ese buen humor con esta pequeña entrada de hoy...
Que grande era la Ella.
ResponderEliminarY a mí que la Ella cuando se pone tup tariii chup chup chariiii no me gusta nada. Yo soy más de la Ella de BigBand de los Songbooks, más tranquila, más clasicorra.
ResponderEliminar¿ Y no hay ninguna remezcla?
ResponderEliminarNadie es perfecto, Mocho :-)
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