enero 03, 2010

Losing my pesky virginity

La verdad es que no figuraba entre mis propósitos de año nuevo (fundamentalmente porque este año no he hecho propósitos de ningún tipo), pero la cosa ha surgido así y la verdad es que no me puedo quejar: a mis treinta y cinco añazos, por fin he perdido mi molesta virginidad.

Como lo oyen: hasta hace unas pocas horas, yo era virgen. Prohibido hacer el chiste malo de la pastorcilla.

Y la cosa tiene su delito, porque siendo lo que yo he sido la verdad es que no se explica cómo no he caido en la tentación antes. Y que conste que me gusta jugar con el peligro más que un caramelo a un niño. Y si no, atentos a mis últimos menús:

Almuerzo del viernes, chuletón MUY poco hecho


Cena del viernes, carpaccio


Almuerzo del sábado, steak tartar


Domingo, toneladas de sashimi en un japonés


Como puede verse, a mí la comida me gusta muy muy hecha. Y entonces, ¿cómo es posible que un cavernícula refinado como yo haya llegado a tan avanzada edad sin probar las ostras? Prohibido hacer el chiste malo que todos estás pensando, enfermos mentales.



¿Casualidad? ¿Broma del destino? ¿Crisis galopante? En realidad, el motivo ya da más o menos igual, porque pertenece al pasado. Hoy he perdido la virginidad y por la puerta grande, con unas ostras del número #1 grandes como campos de fútbol y un buen albariño acompañándolas a prudencial distancia. Y al terminar os juro que me han entrado ganas de encender un cigarrillo y decirle a las conchas vacías: "nenas, habéis estado sensacionales".

Como dije hace poco, sólo se muere una vez...


9 comentarios:

Bruto dijo...

¡¡¿Pero a usted no le había dicho el médico que era hipertenso y que tenía colesterol del malo y que no podía comer cosas de esas, señor Sufur?!! Si es que no puede ser...

Nils dijo...

a mí no me gustan nada de nada.

Mocho dijo...

Si están frescas, exquisitas.

Si... bueno... pues espera unas 24 horas hasta que te dé la intoxicación y luego nos cuentas.

Sufur dijo...

Aunque parezca mentira, Bruto, todas esas cosas (salvo el tartar) son bajas en grasas, colesterol y no tienen apenas sales añadidas :-P En cualquier caso, en estos días tan entrañables me estoy pegando tales atracones que por eso decía al final eso de "solo se muere una vez"...

Nils: no problemo. Pa mí todas.

Mocho: en realidad, ese era el principal motivo por el cual aún era virgen. Pero ayer mi curiosidad venció a mi hipocondria, lo cual es todo un logro para moi...

Nyc dijo...

¿Ostras? No, gracias, de verdad
Y ya tendrás el resto del año para recuperar niveles aceptables de tensión (arterial)

hm dijo...

Yo me comería cualquier cosa de ahí menos las ostrás... que es que a mi no me gusta el sabor del marisco, moluscos, etc... rarito que es uno...

...pero en lo de la carne coincido... como digo digo siempre en los restaurantes, muy poco hecho, lo suficiente para que coja temperatura de presa...

Eleuterio dijo...

A mí me gusta la carne rosa también.
Y sigo siendo virgen, no las he probado nunca.
(Y aquí están permitidos los chistes tontos de doble sentido).

Deric dijo...

bueno, sirves la confusión en plato grande! Pero de los platos de las fotos, te los regalo todos, incluidas las ostras!
qué repelús!

´´Saray´´ dijo...

Yo nunca las he probado y eso que me encanta el marisco pero es que son tan feas...no tienen pinta de apetecibles.

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